Esta receta original, y a la vez tradicional, del dulce más típico en Semana Santa es un postre que está basado en una rebanada de pan empapada en leche, rebozada en huevo, frita y aromatizada al gusto, en este caso con azúcar.
Es un postre muy sencillo y muy común en estas fechas. Aquí os dejo la receta:
INGREDIENTES:
- 1 barra de pan del día anterior
- medio litro de leche aproximadamente
- 2 huevos grandes
- 150 g. de azúcar blanco
PREPARACIÓN:
- Cortar el pan en rebanadas de 2 cm más o menos.
- En un bol poner la leche e introducir las rebanadas para que se empapen en ella. Al cabo de unos minutos las quitamos y las dejamos a escurrir sobre una rejilla o papel absorbente.
- Pintar las rebanadas con huevo.
- Freír en bastante aceite de oliva y que esté bien caliente.
- Así que estén doraditas las quitamos y las ponemos en una fuente sobre papel absorbente.
- Una vez hechas las impregnamos en azúcar, y ya están listas para comer.
Nota: existen numerosas variantes. Podéis añadirle canela, bañarlas en almíbar de miel o incluso en vino de O Porto. Están muy ricas si por encima le echáis un poquito de natillas ;)
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